Dios está aquí,
tan cierto como el aire que respiro,
tan cierto como la mañana
se levaanta,
tan cierto como que este canto
lo puedes oír.

Lo puedes sentir
moviéndose entre los que aman.
Lo puedes oír
cantando con nosotros aquí.
Lo puedes llevar
cuando por esa puerta salgas.
Lo puedes guardar
muy dentro de tu corazón.

Estribillo
Lo puedes notar
junto a ti en cualquier momento;
le puedes hablar
de esa vida que le quieres dar;
no temas ya más,
Él es Dios y nos perdona a todos;
Jesús está aquí,
si tú quieres le puedes seguir.

Estribillo
Escucha, tú, la Palabra de Dios,
no solo con tus oídos,
también con tu corazón.
Escucha, tú, la Palabra de Dios,
estate siempre atento a su voz.

Escucha, tú, la Palabra de Dios,
no solo con tus oídos,
también con tu corazón.
Escucha, tú, la Palabra de Dios,
estate siempre atento a su voz.

Déjala entrar dentro de tu corazón,
pásala a tu mente y a tu situación;
vívela, vívela en tu realidad,
haz que por tu vida llegue a los demás.

Estribillo
Si tus manos son instrumento de Dios,
da tu pan al pobre, préstale tu voz,
ama a Dios, ama a Dios con tu caridad;
oye su Palabra con sinceridad.

Estribillo
Adoraré tus pies heridos,
tus pies de mensajero,
que traen la paz,
que traen la paz a mi corazón.

Yo adoraré, Señor, y abrazaré
tu cuerpo herido.
Yo adoraré, Señor, y abrazaré
tu cruz,
(tu humanidad,
tu humanidad.) (Bis)

Adoraré tus rodillas,
que soportaron mis caídas
y se doblaron, y se doblaron
ante mí.

Estribillo
Adoraré tus manos suaves
y las heridas que las traspasan.
Con ellas me alzaste y me abrazaste
en mi seol.

Estribillo
Adoraré tu rostro herido,
tu semblante sin hermosura
y en cada espina de tu cabeza
veré a mi Dios.

Estribillo
Abrazaré fuerte tu pecho
y escucharé tus latidos,
Y de la herida de tu costado
yo beberé.

Estribillo
Santo, Santo, Santo-o-o,
Santo es el Señor,
Dios del Universo-o,
Dios del Universo-o-o.
Santo, Santo, Santo-o-o,
Santo es el Señor,
Dios del Universo-o,
Dios del Universo-o-o.

Llenos están el cielo y la tierra de tu Gloria.
Hosanna en el cielo-o-o. Hosanna en el cielo-o-o.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo-o-o. Hosanna en el cielo-o-o-o.

Estribillo final una vez y terminar en DO.
Que bien se esta aquí, Señor
No hay otro lugar donde estar mejor
Tu mano nos guía
Tu amor nos protege
Confiamos en ti. (BIS)


Seremos tus manos
Para construir un mundo nuevo
Seremos tu boca
Para no callar la verdad
Seremos tus ojos
Para mirarnos con ternura
Y tu misericordia
Para escuchar sin juzgar.
Intro (bis):


Todo empezó en una cruz
donde un hombre sufrió
y un Dios se entregó.
Silenciosa la muerte llegó
extinguiendo la luz que en un grito se ahogó.

Viendo su faz de dolor
una madre lloró y su amigo calló.
Pero siendo una entrega de amor
su camino siguió y en algún otro lado
una luz se encendió.

Siendo hombre, amigo, esclavo y maestro;
siendo carga pesada, profesor y aprendiz
entregó hasta su cuerpo en el pan
y la vid.

Desde entonces lo he visto
caminar a mi lado,
a ese Dios que se humilla
y muere por mí.
Es la barca en mi playa,
el ruido del silencio,
que se acerca a su Hijo y me abraza feliz,
que se acerca a su Hijo y me abraza feliz.

Viendo un humilde calvario
con rostro cansado soporta la cruz,
y al verme rezando a sus pies
se olvida de Él, me toma en sus brazos
y me acoge otra vez.

Siendo fuego, paloma, el agua y el viento;
siendo niño inocente, un Padre y Pastor
hoy acepta mi ofrenda,
es mi vida Señor.

Estribillo
Y si ahora yo acepto esta cruz
es por esa persona, ese Dios,
es por Cristo, Jesús.

Estribillo
Junto a ti, María, como un niño quiero estar,
tómame en tus brazos, guíame en mi caminar.
Quiero que me eduques, que me enseñes a rezar;
hazme transparente, lléname de paz.

Madre, Madre, Madre, Madre.
Madre, Madre, Madre, Maadre.

Gracias, Madre mía, por llevarnos a Jesús,
haznos más humildes, tan sencillos como tú.
Gracias, Madre mía, por abrir tu corazón,
porque nos congregas y nos das tu amor.

Estribillo