Surgirá un mundo nuevo,
levantado por la fuerza del amor,
hecho por hombres con el corazón abierto
al Espíritu de Dios.
Y su Ley será el perdón y su justicia el amor,
por la fuerza de su fe en el Señor.

Un solo Dios nos reúne en su paz,
derribando las murallas
con que fuimos separados,
un solo bautismo, una misma fe;
por su cruz Él ha vencido a la muerte,
ha creado en sí mismo un hombre nuevo.

Estribillo
Gentes de toda raza, lengua y nación,
formaremos este pueblo dedicado al Señor:
sin esclavo ni libre, hombre ni mujer.
Uno sólo es el Señor y Él nos une.
Cantaremos las grandezas del Dios vivo.

Estribillo
(Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.) (Bis)

Si sientes que Cristo,
en ti vivo está
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!
Si piensas que el mundo,
aún puede cambiar
grita fuerte en tu alma:
¡Aleluya!

Aleluya, aleluya,
aleluya, aleluya,
aleluya.
Quiero alcanzar el cielo con tus pasos.
Quiero abrazar la vida con tus manos.
Decir al mundo con tu voz hasta morir

que todo un cielo es solo para mí.

Quiero estrenar mis ojos en tus brazos.
Quiero besar el suelo con tus labios,
borrar la noche y dar a la herida, cicatriz.

Quiero empezar de nuevo solo en Ti.

Tomad, comed,
me entrego por Amor hasta el final.

Tomad, bebed,
el cielo entero sabe a Vino y Pan.


Tomad, comed,
me entrego por Amor hasta el final.

Tomad, bebed,
el cielo entero sabe a Vino y Pan.

Quiero pisar tu huella en cada espacio.
Quiero buscar, mirarte en todos lados,
perder la vida hoy y ganarla toda en Ti.

Quiero empezar y terminar por Ti.

Estribillo
(Santo, Santo, Santo, Santo,
Santo es el Seño-o-or.
Llenos están el cielo y tierra
de tu amor.) (Bis)

Bendito el que viene en el nombre,
el que viene en el nombre del Señor,
del Señor.

Nota: es opcional cantar el estribillo final una vez

Segunda voz:
Santo es el Señor,
llenos están
el cielo y tierra
de su amor.
(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(ten piedad de nosotros,
de nosotros ten piedad.)(Bis)

(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(ten piedad de nosotros,
de nosotros ten piedad.)(Bis)

(Cordero de Dios que quitas
el pecado del mundo,) (bis)
(danos la paz,
danos la paz.)(Bis)
Ya ves que he querido estar tan cerca,
tan cerca que he dejado mi presencia en ti.
Yo siempre estaré junto a la puerta,
esperando que tú me quieras abrir.

Aun cuando no estés escuchando,
aun cuando dudes de que pueda ser Yo,
que sepas que estaré esperando a tu señal.

Vengo en lo escondido y tan callado,
tan solo quiero descansar un rato en ti.
Llego en el silencio y, sin embargo,
con un amor que necesito compartir.

Aun cuando no quieras mirarme,
aun cuando te avergüence tu corazón,
mi deseo es de perdonarte, y de olvidar.

¡Haz silencio y hablaré tan fuerte!
¡Haz silencio y déjame que entre!
Yo sólo sé buscar en lo escondido.

Yo quisiera que algún día entendieras
que me sé de memoria todo lo que hay en ti.
Aunque tú no quieras tu miseria,
te quiero como eres, Yo te quiero así.

Aun cuando estés herido y solo,
aun cuando te rechacen, en el dolor,
sabes que lo comparto todo,
Yo lo sufro contigo, es cosa de dos.

Estribillo
Ya ves que he querido estar tan cerca,
tan cerca que he dejado mi presencia en ti.

¡Haz silencio y hablaré tan fuerte!
¡Haz silencio y déjame que entre!
Yo sólo sé buscar en lo escondido,
yo sólo sé saciar mi sed contigo.

Ya ves que he querido estar tan cerca,
tan cerca que he dejado mi presencia en ti.
(Sé de quién me he fiado,
confío, Señor, en Ti.
Y aunque a veces parezca de piedra,
confío, Señor, en Ti.
Y aunque el corazón se pegue a la tierra,
confío en Ti, confío en Ti,
mi Señooor, mi Señooor.) (Bis)

...mi Señor.
Versión Parroquia san Bruno-Misa de 20h:
Intro:


Dijiste "sí"
y la tierra estalló de alegría.
Dijiste "sí"
y en tu vientre latía divina la Salvación.

Hágase en mí, de corazón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

(María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de Dios Redentor.)(Bis)
(Si se termina aquí el canto, en el bis:
primavera de Dios Redentor.)

Gabriel tembló,
conmovido con tanta belleza,
Madre de Dios,
cuélame en tu mirada de amor de la Anunciación.

Hágase en mí, de cora zón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

(María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de un Dios Redentor.)(Bis)
(Si se termina aquí el canto, en el bis:
primavera de Dios Redentor.)

Nota: en el estribillo final, sea cuando sea,
en el bis, la segunda voz dice: Ave María.

Versión original:
Intro:


Dijiste "sí"
y la tierra estalló de alegría.
Dijiste "sí"
y en tu vientre latía divina la Salvación.

Hágase en mí, de corazón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de Dios Redentor.

Gabriel tembló,
conmovido con tanta belleza,
Madre de Dios,
cuélame en tu mirada de amor de la Anunciación.

Estribillo final (bis):
Hágase en mí, de cora zón,
la voluntad de mi Señor.
Que se cumplan en mí cada día
los sueños de Dios.

María,
las tinieblas se harán mediodía
a una sola palabra que digas,
en tus labios alumbra ya el sol.

María,
la doncella que Dios prometía,
un volcán de ternura divina,
primavera de un Dios Redentor.
(en el bis: primavera de Dios Redentor.)

Nota: en el estribillo final, en el bis,
la segunda voz dice: Ave María.